FAQ´s
1. ¿Cuál es la piel sensible?
La piel sensible es una condición que se manifiesta como respuesta cuando no hay una barrera cutánea saludable. Esta sensibilidad puede ser genética o puede originarse a causa de haber usado productos agresivos con la piel, una limpieza excesiva, medicamentos sensibilizantes, climas extremos, estrés e incluso por falta de sueño.
La clave es ayudar a este tipo de piel a reducir la inflamación y a restaurar la barrera cutánea.
2. ¿Cómo saber si tienes la piel sensible?
Identificar la piel sensible implica estar atento a señales como enrojecimiento, picazón, ardor o descamación después de la exposición a productos o condiciones ambientales. Sensaciones de tirantez o irritación al tacto son comunes. La piel sensible suele reaccionar con más frecuena a las fragancias, aceites esenciales o conservantes. Puede presentar sensibilidad a cambios climáticos, como viento o frío intenso.
Realizar pruebas de parche al probar nuevos productos y observar cómo reacciona la piel a diversos factores ambientales ayuda a determinar si tienes piel sensible, facilitando la adaptación de una rutina de cuidado adecuada.
3. ¿A qué se debe la sensibilidad en la piel?
La sensibilidad en la piel puede deberse a múltiples factores. La genética desempeña un papel crucial, también los productos agresivos, medicamentos sensibilizantes, climas extremos, estrés e incluso por falta de sueño.
Por otra parte, el uso de productos con ingredientes irritantes, fragancias o conservantes también contribuye a la sensibilidad, y condiciones médicas, como dermatitis o eczema, intensifican la respuesta cutánea. La exposición constante a factores irritantes sin protección adecuada daña la barrera cutánea, resultando en mayor sensibilidad.
4. ¿Qué productos ayudan con la piel sensible?
Para la piel sensible, es crucial elegir productos suaves, sin fragancias, sin alcohol ni ingredientes irritantes. Y con componentes como aloe vera, aminoácidos, centella asiática, artemisia. regaliz, manzanilla y/o guaiazuleno para calmar.
Opta además por un protector solar gentil y prefiere exfoliantes gentiles como el PHA. La clave es una rutina simple y gentil que fortalezca la barrera cutánea sin causar irritación.